Dicen que no hay mayor motor de cambio que la voluntad. La transformación digital de una empresa depende, entre otros factores, de la voluntad de las personas para llevarla adelante. La resistencia al cambio, la desconfianza y los temores son algunos de los principales obstáculos en el camino hacia la digitalización.
Pero, ¿cómo lograr que todos en el equipo asuman una actitud positiva hacia la digitalización? ¿Cómo lograr ese “efecto contagio”? Aquí es donde entra en juego el papel del “líder digital”, un factor clave en este proceso.
Este rol es fundamental para promover a las tecnologías no como una amenaza, sino como parte de una visión compartida de la organización. Su principal tarea será no sólo elegir la tecnología más adecuada, sino trabajar en su implementación y escalarla a toda la organización, garantizando su adopción extensiva.
No debe ser necesariamente un programador o un especialista en informática, pero sí debe tener actitud, iniciativa y las siguientes habilidades:
1)Visión a futuro: debe idear un cambio cultural y de mentalidad a largo plazo en la organización. No debe limitarse a tecnologías de moda, sino adelantarse e identificar tendencias y oportunidades. Entender qué impacto pueden tener en el negocio y planificar acciones que permitan estar a la altura de las circunstancias en un futuro. Un ejemplo de esto dio Carlos Pinto, director de Planexware, en la nota “Acuerdo Mercosur-UE: ¿puede la digitalización de los negocios evitar un naufragio?”
2) Mentalidad abierta: un líder digital debe poder aceptar nuevas ideas, incluso cuando no coinciden con sus ideas sobre el funcionamiento de un negocio. Deben poder superar cualquier tipo de prejuicio y descartar ideas sólo una vez de haber sido evaluadas.
3) El cliente, ante todo: en este proceso de transformación digital, el cliente debe tener un rol privilegiado. Una experiencia al cliente cada vez más superadora debería ser una de las mayores preocupaciones de cualquier líder digital.
4)Actitud: el líder digital debe tener iniciativa, ser emprendedor, buscar nuevas ideas. El objetivo final es transmitir esta actitud a todos los miembros de la compañía. Se trata de un concepto de liderazgo que ya no es autocrático, sino que debe integrar a toda la organización.
5) Capacidad de aprendizaje: Es esencial para crecer. La mejora y la formación constante son necesarias para que un líder digital pueda desarrollarse plenamente.